Hola, hoy en el noticiero primero noticias salio una nota referente a el proyecto "Resplandor Teotihuacano”. Retomando el tema de la modernidad, quisiera compartirles mi sentir sobre lo que considero no se debe hacer, en nombre de la modernidad, necesaria pero regularmente con una mala praxis.

Durante el inicio del proyecto para iluminar Teotihuacan se ha dañado gran parte de este sitio arqueológico, seguramente la justificación oficial será dar realce a los sitios turísticos del país y generar ingresos por medio del turismo que nos beneficiarán bla bla bla. No es necesario que nos digan lo que es clarísimo, el proyecto es para llenar los bolsillos de las “mentes brillantes” a las que se les ocurrió el numerito. Como mencione anteriormente, si nos remontamos al inicio de dicho proyecto nos percataremos que las obras no fueron supervisadas adecuadamente para preservar el lugar, solo se empezó a perforar a destajo para colocar clavos expansivos que sostendrían al equipo de iluminación, es obvia la falta de interés por el sitio; se percibe clarísimo el gran interés económico de los involucrados. Afortunadamente técnicos y personal del INAH denunciaron lo que las autoridades de la misma institución, negaban al declarar ante los medios que no causarían daño alguno a la zona arqueológica.
Gracias a la denuncia han parado la arbitrariedad con que se llevaban a cabo las obras, estas continuaran ahora si, bien supervisadas para que realmente el proyecto por lo menos en su instalación no dañe aún más este valioso sitio arqueológico, por que los otros supuestos beneficios están por verse…¿los veremos?

La modernidad, el desarrollo y el proceso por lograrlo son necesarios dentro de la evolución de la sociedad, pero desafortunadamente la parte del proceso, es mal utilizada en la mayoría de los casos.

Les dejo un link y una notita

saludos


http://www.iluminet.com.mx/portada/que-pasa-en-teotihuacan/
12-Ene-2009
La república de las letras
Humberto Musacchio
Teotihuacán y otras zonas arqueológicas

Para Carmen Aristegui, voz necesaria Continúa el debate suscitado por las obras de iluminación de Teotihuacán. Hoy deberá visitar la zona arqueológica una comisión de diputados, que seguramente se informará acerca de las características del espectáculo de luz y sonido que ahí se monta y sobre la forma de evitar daños, pese a la avalancha de visitantes que se espera, pues son 500 las funciones que se pretende realizar. Los técnicos y profesionales del INAH han denunciado daños en las estructuras por los miles de agujeros abiertos para sostener las instalaciones, a lo que las autoridades del Instituto responden que las perforaciones se han hecho sobre “material de reposición”, esto es, cemento, cal y piedras, a lo que los denunciantes reviran que tales piedras son de la misma zona arqueológica, lo que responde el vocero del INAH señalando que las piedras son tan milenarias, por viejas, como las que están en otra parte de las construcciones. Falta todavía el debate sobre los daños que ocasionará la afluencia nocturna de turistas, la instalación de un graderío para medio millar de personas y los paseos que efectuarán vehículos motorizados, una especie de trenecitos con llantas. Todo por unos billetes indispensables ante la crisis que ya se nos dejó venir. ¿O no?
Disponible en http://www.exonline.com.mx/diario/columna/470334